Nunca dejaré de repetir que las ciudades menores son un destino infravalorado para los que sólo podemos viajar en temporada alta. Así, como combinación del viaje a Bolonia que realicé en enero de 2017 visité una serie de ciudades en sus alrededores (ya os hablé de Rávena en otra ocasión), lo que contribuyó a disfrutar de una región rica en patrimonio y tranquila en cuanto a turismo se refiere.
En esta entrada os hablaré de la archiconocida Venecia, y las menores Ferrara y Modena.